¿Qué pasa con tus finanzas cuando falleces?

Por Claudia Castro*

Las festividades por el Día de Muertos son un buen pretexto para reflexionar sobre la vida y la muerte, y lo que pasa con las finanzas ante el fallecimiento de una persona no debería de estar exento, incluyendo por supuesto lo que se refiere a los créditos adquiridos.

Lo primero que queremos decirte al respecto es que es importante tener un plan de previsión que incluya testamento, seguro de vida contratado y plan funerario. No obstante, la penetración de estos productos es aún muy baja.

Se estima que en México, apenas 1 de cada 20 adultos ha hecho su testamento de acuerdo con los datos más recientes de la Secretaría de Gobernación.

Alrededor de 11 millones de mexicanos tienen un seguro de vida (9% de la Población Económicamente Activa, según la Asociación Mexicana de Instituciones de Seguros AMIS con cifras a 2021) y sólo 4% de ésta cuenta con un plan funerario, de acuerdo con Profeco.

Además de tomar en cuenta lo anterior para que en la medida de lo posible nuestra partida no signifique un descalabro financiero para la familia, es necesario conocer ciertas particularidades para el caso de las deudas.

• Tarjetas de crédito y/o departamentales: ante el fallecimiento del deudor se tiene la liberación de la deuda hasta por el total del límite de crédito de la tarjeta o el saldo insoluto de la cuenta, tanto del titular como de las adicionales, es decir, lo que se deba de aquellas tarjetas que se hayan generado como una extensión de la tarjeta de crédito del titular y en la cual se comparte la misma línea de crédito del plástico principal.

Pero ¡ojo! Las compras posteriores a la muerte del titular que se realicen con tarjetas adicionales se tendrán que cubrir.

• Crédito automotriz: los créditos para la compra de auto incluyen un seguro con el que se salda la deuda si el titular fallece.

• Hipotecas: estos préstamos también cuentan con un seguro para saldar la deuda y que la propiedad se libere a los beneficiarios. Sin embargo, el crédito deberá estar al corriente y si se trata de un préstamo conyugal, sólo cubrirá el 50% del adeudo de quien falleció.

Si bien ante la pérdida de un ser querido podría ser complicado emocionalmente hacer estos trámites, es algo que será necesario. De ahí la importancia de conocer qué pasa con las deudas cuando una persona muere y que en vida seamos responsables con nuestra administración financiera, pagando puntualmente nuestros créditos y seguros.

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*Periodista especializada en temas financieros. Ha colaborado en periódicos como Excélsior, La Razón de México y El Economista, así como en revistas de negocios como Entrepreneur y Mundo Ejecutivo. Actualmente dirige la plataforma digital Hablemos de Dinero.