Tramita tu carta finiquito

Una de las sensaciones más gratificantes de la vida adulta la experimentamos cuando terminamos de pagar el crédito automotriz o la hipoteca. Ese momento en el que hacemos el último depósito o la última transferencia es casi una fiesta.

Y así como en todo gran evento tomamos fotografías tanto para tenerlas de recuerdo personal, como para comprobar que estuvimos ahí, es importante, cuando acabes de pagar tus créditos, tramitar y conservar tu Carta Finiquito, que es un documento en el que se asienta claramente que el financiamiento ha sido cubierto en su totalidad y que no hay adeudo de tu parte.

La Comisión Nacional para la Protección y Defensa de los Usuarios de Servicios Financieros (Condusef) dice en su sitio de Internet: “La Carta Finiquito es la garantía de que tu cuenta está en ceros y que se procederá a cancelar el registro de la misma en la base de datos del banco”. Así que, en caso de necesidad, con ella puedes comprobar que el crédito está saldado.

Sumado a tu Reporte de Crédito Especial (tienes derecho a uno gratis cada 12 meses y los adicionales que necesites puedes obtenerlos en nuestra página o a través de la app de Buró de Crédito por sólo $35.60 cada uno), tener un documento en el que el banco asiente claramente que has pagado tu crédito y que esa relación financiera ha llegado a feliz término no es sólo una foto del recuerdo. También te puede servir para demostrarlo en caso de necesidad de alguna aclaración con tu banco o con alguna otra institución.

Si además lo acompañas de Mi Score, por $58, tendrás el panorama completo de tu situación crediticia.

“Papelito habla”, dirían los abuelos.

Y la Carta Finiquito habla bien, muy bien de ti.

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